Como bien es conocido, la dieta mediterránea es una de las posibilidades en la gastronomía mundial de mantener la salud lo más fortalecida posible, y el epicentro de todo ello es el aceite de oliva, especialmente si se trata de virgen extra. Todo lo que parezca dieta mediterránea pero no contiene AOVE, no lo es, recomendando su consumo en torno a cuatro cucharadas soperas al día.

Así fue establecido por el estudio de más de 6.000 personas durante seis años denominado MEDAS (Mediterránean Diet Adherence Screener), validado en países como la propia España, Portugal, Alemania, EEUU, Brasil, Croacia o Reino Unido, entre otros, y realizado por Predimed mediante 14 items que indicaban el nivel de adherencia que ofrecía el análisis de cientos de metabolitos en sangre, pudiendo predecir así aspectos tan claves como ciertos tipos de cáncer, evitar fibrilación ventricular (ritmo irregular del corazón) y otras enfermedades cardiovasculares o la diabetes tipo 2.

En los dos primeros casos, se debe a componentes como el polifenol hidroxitirosol que reduce la inflamación vascular y contiene propiedades antiinflamatorias. Respecto a una enfermedad que afecta a seis millones de personas como la diabetes, el AOVE remplaza las grasas saturadas por las no saturadas, lo que favorece notablemente en aspectos como la circulación en la sangre, donde se encuentra el azúcar, o reducción de sobrepeso, uno de los mayores riesgos para personas diabéticas. Además, según otro estudio, este realizado por la Universidad de Roma, el componente oleouropeína reduce la glucemia pospandrial, es decir, la alta producción de insulina que conlleva al inicio de la diabetes a las personas más propicias.

Todo ello, además, avalado por una de las bases científicas con más credibilidad del mundo, como es la de investigadores de la Universidad de Harvard.

Sin embargo, en Jacoliva queremos elevar la excelencia a su máxima expresión en todos los campos, especialmente en uno tan vital del sector como es la salud. Y es que tratamos de cumplir con ese aspecto, tanto en su difusión como en la elaboración de nuestros AOVEs, entre los que disponemos ecológicos, un Denominación de Origen Protegida y uno de los cosecha temprana más precoces de España, lo que posibilita un aprovechamiento máximo de sus propiedades, para la salud y sensaciones como el aroma, la vista y el sabor. Sin duda, la principal causa de todas estas virtudes es que empleamos la variedad autóctona Manzanilla Cacereña, la cual se cosecha en nuestro entorno del Norte de Extremadura, que posee un privilegiado clima de secano.

Escrito por Javier Muñoz